Puestas de sol en Altea: los mejores miradores
Ver atardecer en Altea es un pequeño placer que no te puedes perder porque la coqueta villa marinera es un enclave privilegiado para admirar ese juego de colores increíbles que surge cuando el sol se despide, poco a poco, del azul del Mediterráneo.
Alquilar un barco con tu titulín en Altea y contemplar, fondeando tu barco desde el mar, el atardecer es una experiencia única, pero hay otras opciones para disfrutar de este espectáculo cotidiano que nos regala la naturaleza.
¿Quieres descubrir dónde ver puestas de sol en Altea?… toma nota de los mejores miradores y de algún que otro enclave ‘secreto’ donde dejarte sorprender.
Los mejores miradores para ver la puesta de sol en Altea
Relaja, inspira, trasmite paz invita, quizá, a reflexionar o simplemente a sentirte bien con solo mirar a tu alrededor… el atardecer en Altea es algo que cada uno disfruta a su manera y hay algunos lugares perfectos para ver cómo el sol se va retirando.
Tienes espléndidos miradores en Altea en el propio casco histórico y también en puntos cercanos a los que puedes llegar fácilmente.
Déjate llevar por ese momento mágico de la puesta de sol en Altea y disfruta de la vista de su espléndida bahía, corazón de la costa Blanca. Sin duda uno de los mejores planes con niños en la zona de Altea.
Mirador de los cronistas de España
Es el mirador más conocido de Altea y no cabe duda que sus impresionantes vistas son ideales para descubrir toda la belleza de un atardecer en este rincón mágico del Mediterráneo.
Se encuentra en la zona más alta, junto a la emblemática plaza de la Iglesia, donde es fácil reconocer las cúpulas azules de la Iglesia del Consuelo.
Llegar a él resulta muy sencillo. Solo tienes que dejarte llevar por recorrido de las coquetas y empinadas calles que suben desde el puerto y la playa al techo de Altea.
Desde el mirador de los cronistas, la bahía de Altea al atardecer es una maravillosa postal llena de matices. El litoral de la costa alicantina se dibuja ante ti ofreciéndote una impresionante sensación de amplitud y permitiéndote ver la playa del Albir, el horizonte a lo lejos de la bahía, el club Náutico y la espectacular Serra Gelada. ¿Se puede pedir más?
Mirador del Portal Vell
También en pleno casco histórico se encuentra este espléndido mirador de Altea, que toma su nombre de la antigua puerta que daba acceso al recinto amurallado de la ciudad.
Desde aquí, la puesta de sol impresiona. El mar se convierte en absoluto protagonista mientras el sol se esconde y, en este caso, verás a tus pies la zona norte de Altea, la sierra de Bernia a lo lejos y, quizá, en días despejados, la costa de Calpe y el peñón de Ifach, que parece querer introducirse en el mar.
Mirador Glorieta del Maño
Es también un mirador ‘urbano’, menos conocido pero igual de ideal para disfrutar de los atardeceres en Altea.
La Glorieta del Maño ocupa el lugar en el que se encontraba un baluarte de la antigua muralla, en el ángulo noreste, mirando a la desembocadura del río Algar.
Este mirador sorprende en pleno paseo por el centro, ya que, en él desembocan algunas de las calles más bonitas y transitadas, como la de Salamanca o la de Fondo. La coqueta glorieta permite disfrutar de inmensas vistas panorámicas de Altea y su entorno al finalizar el día.
Torre de Bellaguarda
La torre de Bellaguarda se encuentra en el barrio del mismo nombre, a unos 15 minutos del centro histórico de Altea. Es un lugar poco conocido, al que se llega subiendo a la plaza de la Canterería.
Se trata de una antigua torre de vigilancia de la Edad Media magníficamente reconstruida. Si te apetece disfrutar de una romántica puesta de sol en Altea, desde un lugar privilegiado y sin aglomeraciones, la torre, con sus vistas del mar y de la sierra de Bernia, es una excelente elección.
Mirador Cala del Racó
Muy cerca de la playa del Mascarat, a un paso del puerto deportivo Marina Greenwich tienes uno de los miradores de Altea más espectaculares para vivir atardeceres que no se olvidan.
Es un paraje realmente bello, para disfrutarlo sin prisas y mejor en compañía, quizá con un romántico picnic mientras el sol cae.
Desde este mirador al que se accede fácilmente al estar a pie de carretera, las vistas a la singular cala del Racó del Corb, protegida por los acantilados de Toix, son magníficas y muestran la belleza de la Costa Blanca en todo el esplendor de un precioso atardecer.
Somos expertos en la zona por que si necesitas recomendaciones sobre cualquier cosa puedes contar con nosotros, como por ejemplo, los mejores restaurantes dónde comer en la zona de Altea.